Es un trato
10 Dic 2011 Deja un comentario
en Uncategorized Etiquetas:primer
Comenzar a soltarse de las manos de aquellos que te dieron enseñanza es difícil. Pero a veces sientes que tu camino va por otra ruta y agradeces que te brindaron la confianza para caminar, incluso te mostraron a veces en dónde estaban tus pies, cómo moverte con seguridad con ellos y hasta a danzar.
Es similar al momento en que sales de casa de tus padres a estudiar, un primer paseo fuera, a trabajar… Siempre llevas en tus cimientos esos materiales de base. Amor, entrega, disposición. Mucho de lo que sales a exponer al mundo habla de como comenzaste.
Y como no siempre tienes la misma visión de tus maestros, enfrentarles y dar un giro en el camino es lanzarse al vacío. A veces es tu necesidad de aventura, la audacia de creerte invencible, dueño del destino. Y así es. Otras veces será el cumplimiento de tu misión sagrada. Seguramente habrán aciertos y pérdidas, lo realmente valioso es vivir la experiencia, aprender de tus decisiones y seguir tu camino del corazón.
Habrán ocasiones en que se entrecrucen de nuevo, caminarán un rato juntos y con suerte seguirán rutas paralelas. Un buen maestro siempre se sentirá orgulloso y feliz por tu independencia, incluso esperará cuando de algún modo le sobrepases y le eches una mano para alcanzarte.
Honra y respeta a tus maestros, sin idolatrías. Sabiéndolos humanos e imperfectos, pero con la divinidad brillando en su esencia. Conectándote con ellos en donde todos somos iguales e indivisibles para cada ocasión en que necesites inspirarte. Reconoce su humildad y la genialidad de haber reconocido lo mismo en tí, hasta de pulirte como un diamante para verte relucir con tu propio brillo.
Y si te han enseñado bien, seguramente no repetirás sus errores.
Mereces el puesto del profesor, haz tu mejor trabajo.
Hello world!
09 Jun 2011 Deja un comentario
Solvitur ambulando…
Se resuelve andando como los laberintos.